Ensayos Sobre los Movimientos

Eduardo Silva: 

 

El Vanguardismo literario es todo el conjunto artistico que tuvo origen en el siglo XX que buscó innovación en las artes, tenian un aire provocador creando manifiestos que atacaban los manifiestos que lo antecedian, se divide en varias corrientes como lo fué El Existencialismo, una corriente filosófica que tuvo origen en el siglo XIX, esta se prolongó casi hasta la mitad del siglo XX y trata la mayor parte de la historia de la humanidad con temas llenos de duelo, melancolía anhelos, esperanzas y angustias; temas capitales de los mismos. Antecede del Siglo XIX por el pensamiento de Kierkegaard y Nietzsche, y adentrandose mas en el pesimismo Schopenhauer y Dostoyevski; Los filósofos del siglo XX mas reelevantes en esta corriente son Heidegger, Jaspers, Sartre (Quíen decía que en el hombre la existencia procedia de la escencia, osea, que el hombre era "Libertad"), De Unamuno, De Beauvoir y Campus; podemos decir que el Surrealismo fue un movimiento "Artistico & Literario" que surgió en Francia gracias al dadaismo en los años 1920 por la ideología de André Breton y su primera fecha historica fue en 1916 ya que, Breton hace enfasis y descubre las teorias de Freud y Jarry, conociendo también a Vache y a Apollinaire; después se da un roce algo confuso con el dadaismo que decanta las ideas de este movimiento ya que el dadaismo se inclinaba a la destruccion y el surrealismo a la construccion romántica, por lo tanto este par de corrientes se volvieron catalizadores a medida que se desarrollaban; por su parte Breton en 1924 escribió el "Manifiesto Surrealista" y más adelante expone la nombrada "Psicología Surrealista" que literalmente es que: " El inconciente es la región del intelecto donde el ser humano no objetiva la realidad sino que forma un todo con ella" y el surrealismo por su parte busca transladar esa forma de pensar por medio de imagenes y escritos al mundo del arte; hablamos del dadaismo com un movimiento cultural que se dió en 1916, propuesto por Hugo Ball (Primer escritor dadaista) y tuvo sus raíces precisamente en un cabaret de Zurich llamado "Voltaire" en Suiza. Posteriormente se unió a este movimiento Tzara quien seria una especie de "Emblema" para el Dadaismo; se caracterizó por ser un movimiento opositor al positivismo, por lo que se podria decir que era un movimiento "rebelde" ya que se burlaba de los artistas burgueses y creaba un aura "Antiartistica" ya que cuestionaba las mismas pero a su vez abarcaba gran variedad de manifestaciones como lo son la poesía, la música, la pintura y la escultura; tambien podriamos recalcar que el nombre dadaista en terminologia no tiene que ver con la ideologia que llevaban; y para conculir toquemos el tema del futurismo que tuvo su origen en Milan (Italia) por Tommaso Marinetti y estuvo caracterizado por eliminar las reglas de escritura (puntuacion), los ritmos y todo tipo de sintaxis que son elementos propios de la poesía; este estaba centrado en lo revolucionario y tomaba aspectos de lo sensual y lo belico, tambien con lo mecanico en cuanto a la inteligencia del hombre, ademas de eliminar el nombrado " Yo Poético".

Fernando Medina: 

 



El vanguardismo como corriente que viene de Europa se caracteriza por una nueva sensibilidad que busca distinta formas experimentales. Estas diferencias de tendencias presentes en el siglo XX se presentan por diferentes características. Entres las diferentes vanguardias se destacan A) futurismo: surgió en Milán, Italia por Tommaso Marinetti . Este movimiento rompe con la sintaxis  con el ritmo y los signos convencionales de la puntuación. Considera como elementos principales de la poesía, el valor, la audacia y la revolución. Los postulados del futurismo. Exaltación de lo sensual, lo nacional y guerrero. Adoración de la maquina como prolongación del hombre inteligente. Relato de la realidad en movimiento, suprime el yo poético. Destrucción de la sintaxis y la puntuación. Con respecto al dadaísmo apareció en Zurich, suiza en 1916-1922, su fundador Tristán barra, como oposición al pasado violento de la guerra mundial. El poeta dadaísta, suele hacer una sucesión de palabras y a veces de sonido, lo que hace difícil encontrar el hilo conductor de la lógica y se distingue por: inclinación a lo dudoso, el terrorismo, la muerte. Recrea las expresiones de sueño y busca renovar la expresión mediante el empleo de materiales inusuales. su tónica general es la rebeldía o destrucción. En relación al sub realismo, apareció en Francia con Andrés Bretón, se intereso por descubrir los mecanismos del inconsciente en un esfuerzo para sobrepasar la real por medio de lo imaginario y lo irracional. La literatura sub realista es el resultado de una visión de la naturaleza y una liberación del hombre. Se caracteriza por pretender crear un hombre nuevo, resultado del cambio social y de la salud mental, se recurre a la crueldad y al humor negro. A pesar de ser constructivo, no le interesa la conducta moral humana ni las manifestaciones. En relación al existencialismo es un movimiento filosófico que postulo fundamentalmente que los seres humanos en forma individual crean y dan esencia a la vida. Este movimiento descubre la ausencia de una fuerza trascendental, donde el individuo es libre y por ende responsable de sus hechos, lo cual atribuye crear una ética de responsabilidad apartada de cualquier creencia externa a él.  En la vanguardia Hispanoamericana el Existencialismo esta representada por Pablo Neruda quien plantea temas de carácter Filosófico. Sus obras se caracterizan por ser de proyección universal, impresión hermética.

 

El Existencialismo

EL EXISTENCIALISMO


   Es un movimiento filosófico que se preocupa por la existencia humana (la cual posteriormente se plantea que es la única) y pretende dar respuesta a los problemas del hombre, ese hombre que existe y que es algo principal pues es el principio de la existencia, pues el mundo solo es para el hombre lo que este crea de él.

     
Según el existencialismo, nada existe en si, todo es mas no existe; el existencialismo supone que solo existe el hombre en si pues la existencia es el pensamiento de el yo mismo, los pensamientos que no son conocimiento lo que hace a ese ser es en sin el modo de ser del ser lo que en realidad existe; el existencialismo plantea popularmente que la existencia precede a la esencia (sastre), esto implica el concepto de que el hombre es libertad y que existe en la medida en la que es creador de sus ideas, de él mismo y de su mundo, ya que solo el hombre puede crear ideas de esa manera es lo único que existe en esta concepción. El hombre es libre de crear su esencia por medio de sus decisiones; la libertad del ser se encuentra en él mismo por tanto son tomados como sinónimos.El hecho de “sinonimizar” la existencia con la libertad del hombre, todo es mas no existe, y además el hombre podría “dejar de existir” renunciando a su libertad.


Características

  • El existencialismo centra su atención en la existencia y cuestiones propias del hombre, de su ser, y en dar solución a los problemas del hombre.
  • No solo la razón descubre la realidad: también sentimientos básicos como la angustia y frustración la descubren.
  • El pesimismo: los existencialistas se caracterizan por un remarcado pesimismo en sus ideas.
  • El hecho de crear su propia esencia: el existencialismo plantea que solo el hombre existe y que a pesar de haber un pesimismo remarcado se encuentra un positivismo en poder crear la propia esencia.
  • Su popularidad se dio después de la segunda guerra mundial pues era una salida de pensamiento a la bancarrota de valores que dejó la guerra.
  • Las cosas son pero solo existe el hombre: el hombre es el único que se crea su mundo y el existencialismo se concentra en esto se toman como sinónimos existencia al hombre y a la existencia, dado eso las cosas son pero no existen, solo el hombre existe de verdad en función de su libertad.
  • Positivamente afirma la existencia humana y concreta.
  • Sus representantes mantenían una lucha con el racionalismo que terminó con Hegel.
  • Su existencia es libre y precede a la esencia.
  • El hombre es libre.
  • Salir de la propia conciencia para dirigirse hacia el Mundo: El hecho de existir consiste en estar en el mundo e interactuar con el entorno creando la esencia de las cosas saliendo de la propia conciencia.
  • La existencia es tomada como trascendencia: ya que consiste en reconocer lo externo.
  • Los valores son creaciones de la libertad humana: eso se da gracias a que solo el hombre existe y crea sus ideas del mundo.

Autores Representativos

  • Jean-Paul Sartre
(París, 1905-id., 1980) Filósofo y escritor francés. Precoz lector de los clásicos franceses, en 1915 ingresó en el liceo Henri IV de París y conoció a Paul Nizan, con quien inició una estrecha amistad. Al año siguiente, el segundo matrimonio de su madre lo obligó a trasladarse a La Rochelle; hasta 1920 no regresó a París. En 1924 inició sus estudios universitarios en la École Normale Supérieure, donde conoció a Simone de Beauvoir, con quien estableció una relación que duraría toda su vida.  Tras cumplir el servicio militar, empezó a ejercer como profesor de instituto; en 1933 obtuvo una beca de estudios que le permitió trasladarse a Alemania, donde entró en contacto con la filosofía de Husserl y de Heidegger. En 1938 publicó La náusea, novela que pretendía divulgar los principios del existencialismo y que le proporcionó cierta celebridad, al tiempo que se convertía en símbolo de aquel movimiento filosófico. Movilizado en 1939, fue hecho prisionero, aunque consiguió evadirse en 1941 y regresar a París, donde trabajó en el liceo Condorcet y colaboró con A. Camus en Combat, el periódico de la Resistencia.
En 1943 publicó El Ser y la Nada, su obra filosófica más conocida, versión personal de la filosofía existencialista de Heidegger.
  • Albert Camus
(Mondovi, Argelia, 1913-Villeblerin, Francia, 1960) Novelista, dramaturgo y ensayista francés. Nacido en el seno de una modesta familia de emigrantes franceses, su infancia y gran parte de su juventud transcurrieron en Argelia. Inteligente y disciplinado, empezó estudios de filosofía en la Universidad de Argel, que no pudo concluir debido a que enfermó de tuberculosis.
En 1939 publicó Bodas, conjunto de artículos que incluyen numerosas reflexiones inspiradas en sus lecturas y viajes. En 1940 marchó a París, donde pronto encontró trabajo como redactor en Paris-Soir. Empezó a ser conocido en 1942, cuando se publicaron su novela corta El extranjero, ambientada en Argelia, y el ensayo El mito de Sísifo, obras que se complementan y que reflejan la influencia que sobre él tuvo el existencialismo.
Durante la Segunda Guerra Mundial se implicó en los acontecimientos del momento: militó en la Resistencia y fue uno de los fundadores del periódico clandestino Combat, y de 1945 a 1947, su director y editorialista. Sus primeras obras de teatro, El malentendido y Calígula, prolongan esta línea de pensamiento que tanto debe al existencialismo, mientras los problemas que había planteado la guerra le inspiraron Cartas a un amigo alemán.
Su novela La peste (1947) supone un cierto cambio en su pensamiento: la idea de la solidaridad y la capacidad de resistencia humana frente a la tragedia de vivir se impone a la noción del absurdo. La peste es a la vez una obra realista y alegórica, una reconstrucción mítica de los sentimientos del hombre europeo de la posguerra, de sus terrores más agobiantes. El autor precisó su nueva perspectiva en otros escritos, como el ensayo El hombre en rebeldía (1951) y en relatos breves como La caída y El exilio y el reino, obras en que orientó su moral de la rebeldía hacia un ideal que salvara los más altos valores morales y espirituales, cuya necesidad le parece tanto más evidente cuanto mayor es su convicción del absurdo del mundo.
  • Simone de Beauvoir
(París, 1908-1986) Pensadora y novelista francesa, representante del movimiento existencialista ateo y figura importante en la reivindicación de los derechos de la mujer. Originaria de una familia burguesa, destacó desde temprana edad como una alumna brillante. Estudió en la Sorbona y en 1929 conoció a J.-P. Sartre, que se convirtió en su compañero durante el resto de su vida.
Se graduó en filosofía y hasta 1943 se dedicó a la docencia en los liceos de Marsella, Ruan y París. Su primera obra fue la novela La invitada (1943), a la que siguió La sangre de los otros (1944) y el ensayo Pyrrhus y Cineas (1944).
Fue fundadora junto a Sartre, A. Camus, y M. Merleau-Ponty, entre otros, de la revista Tiempos Modernos, cuyo primer número salió a la calle el 15 de octubre de 1945 y se transformó en un referente político y cultural del pensamiento francés de mitad del siglo XX. Posteriormente publicó la novela Todos los hombres son mortales (1946), y los ensayos Para una moral de la ambigüedad (1947) y América al día (1948).
Su libro El segundo sexo (1949) significó un punto de partida teórico para distintos grupos feministas, y se convirtió en una obra clásica del pensamiento contemporáneo. Fundó con algunas feministas la Liga de los Derechos de la Mujer. Ganó el Premio Goncourt con Los mandarines (1954), donde trató las dificultades de los intelectuales de la posguerra para asumir su responsabilidad social. En 1966 participó en el Tribunal Russell, en mayo de 1968 se solidarizó con los estudiantes liderados por Daniel Cohn-Bendit, en 1972 presidió la asociación Choisir, encargada de defender la libre contracepción, y hasta sus últimos días fue una incansable luchadora por los derechos humanos.
Sus abundantes títulos testimoniales y autobiográficos incluyen Memorias de una joven formal (1958), La plenitud de la vida (1960), La fuerza de las cosas (1963), Una muerte muy dulce (1964), La vejez (1968), Final de cuentas (1972) y La ceremonia del adiós (1981).

El Simbolismo

EL SIMBOLISMO 


     Fue uno de los movimientos artísticos más importantes de finales del siglo XIX, originado en Francia y en Bélgica. En un manifiesto literario, publicado en 1886, Jean Moréas definió este nuevo estilo como «enemigo de la enseñanza, la declamación, la falsa sensibilidad y la descripción objetiva». Para los simbolistas, el mundo es un misterio por descifrar, y el poeta debe para ello trazar las correspondencias ocultas que unen los objetos sensibles (por ejemplo,Rimbaud establece una correspondencia entre las vocales y los colores en su soneto Vocales). Para ello es esencial el uso de la sinestesia.
     El movimiento tiene sus orígenes en Las flores del mal, libro emblema de Charles Baudelaire. El escritor Edgar Allan Poe, a quien Baudelaire apreciaba en gran medida, influyó también decisivamente en el movimiento, proporcionándole la mayoría de imágenes y figuras literarias que utilizaría. La estética del Simbolismo fue desarrollada por Stéphane Mallarmé y Paul Verlaine en la década de 1870. Para 1880, el movimiento había atraído toda una generación de jóvenes escritores cansados de los movimientos realistas.

Poetas más representativos


  • Charles Baudelaire (1821-1867)
  • Lautréamont (1846-1870)
  • Stéphane Mallarmé (1842-1898)
  • Jean Moréas (1856-1910)
  • Germain Nouveau (1851-1920)
  • Arthur Rimbaud (1854-1891)
  • Albert Samain (1858-1900)
  • Paul Valéry (1871-1945)
  • Paul Verlaine (1844-1896)
  • Villiers de L'Isle-Adam (1838-1889)


Influencia en la literatura latinoamericana

El simbolismo literario hispano, con algunos importantes antecedentes peninsulares como Gustavo Adolfo Bécquer y Salvador Rueda, se subsumió en un movimiento más general conocido como Modernismo, que empezó en Hispanoamérica.
Se encuentra Simbolismo ya en los cubanos Julián del Casal y José Martí, en el colombiano José Asunción Silva, en el mexicano Manuel Gutiérrez Nájera y otros autores posrománticos americanos como el argentino Leopoldo Lugones,el uruguayo Julio Herrera y Reissig, Ricardo Jaimes Freyre, Amado Nervo, Salvador Díaz Mirón, Guillermo Valencia, o el peruano, José María Eguren; el Nicaraguense Rubén Darío, gran introductor del Modernismo en España, lo asimiló y difundió.
En España lo cultivaron Antonio y Manuel Machado, Juan Ramón Jiménez, Francisco Villaespesa y Ramón Pérez de Ayala entre los más importantes.

El Surrealismo

EL SURREALISMO


     Es un movimiento artístico y literario surgido en Francia a partir del dadaísmo, en la década de los años 1920, en torno a la personalidad del poeta André Breton.


     Los surrealistas señalaron como precedentes de la empresa surrealista a varios pensadores y artistas, como el pensador presocrático Heráclito, el Marqués de Sade y Charles Fourier, entre otros. En la pintura, el precedente más notable es Hieronymus Bosch "el Bosco", que en los siglos XV y XVI creó obras como "El jardín de las delicias" o "El carro de heno". El surrealismo retoma estos elementos y ofrece una formulación sistemática de los mismos. Sin embargo su precedente más inmediato es el dadaísmo, corriente de la que retoma diferentes aspectos.


     El surrealismo tomó del dadaísmo algunas técnicas de fotografía y cinematografía así como la fabricación de objetos. Extendieron el principio del collage (el "objeto encontrado") al ensamblaje de objetos incongruentes, como en los poemas visibles de Max Ernst. Este último inventó el frottage (dibujos compuestos por el roce de superficies rugosas contra el papel o el lienzo) y lo aplicó en grandes obras como Historia Natural, pintada en París en 1926.
     Otra de las nuevas actividades creadas por el surrealismo fue la llamada cadáver exquisito, en la cual varios artistas dibujaban las distintas partes de una figura o de un texto sin ver lo que el anterior había hecho pasándose el papel doblado. Las criaturas resultantes pudieron servir de inspiración a Miró.
     En el terreno literario, el surrealismo supuso una gran revolución en el lenguaje y la aportación de nuevas técnicas de composición. Como no asumía tradición cultural alguna, ni desde el punto de vista temático ni formal, prescindió de la métrica y adoptó el tipo de expresión poética denominado como versículo: un verso de extensión indefinida sin rima que se sostiene únicamente por la cohesión interna de su ritmo. Igualmente, como no se asumía la temática consagrada, se fue a buscar en las fuentes de la represión psicológica (sueños, sexualidad) y social, con lo que la lírica se rehumanizó después de que los ismos intelectualizados de las Vanguardias la deshumanizaran, a excepción del Expresionismo. Para ello utilizaron los recursos de la transcripción de sueños y la escritura automática, y engendraron procedimientos metafóricos nuevos como la imagen visionaria. El lenguaje se renovó también desde el punto de vista del léxico dando cabida a campos semánticos nuevos y la retórica se enriqueció con nuevos procedimientos expresivos.

     El surrealismo tuvo como antecedente la patafísica de Alfred Jarry, y el movimiento dadaísta fundado en Zurich en 1916 por T. Tzara, H. Ball y H. Arp. Animados por idéntico espíritu de provocación, André Breton, Louis Aragon y Ph. Soupault fundaron en París la revista Littérature (1919), mientras en EE.UU manifestaban actitudes similares Man Ray, Marcel Duchamp y Francis Picabia, y en Alemania, Max Ernst y Hugo Ball.A esta fase sucedió una actitud más metódica de investigación del inconsciente, emprendida por Breton, junto a Aragon, Paul Éluard, Soupault, Robert Desnos, Max Ernst, etc. La primera obra de esta tendencia, que cabe calificar de primera obra literaria surrealista, fue Los campos magnéticos (1921), escrita conjuntamente por Breton y Soupault. Tras la ruptura con Tzara, se adhirieron al movimiento Antonin Artaud, André Masson y Pierre Naville.
     Breton redactó la primera definición del movimiento en su Manifiesto del surrealismo (1924), texto que dio cohesión a los postulados y propósitos del movimiento. Entre los autores que citaba como precursores del movimiento figuran Freud, Lautréamont, Edward Young, Matthew Lewis, Gérard de Nerval, Jonathan Swift, Marqués de Sade, François-René de Chateaubriand, Victor Hugo, Edgar Allan Poe,Charles Baudelaire, Arthur Rimbaud, Mallarmé y Jarry. En el mismo año se fundó el Bureau de recherches surréalistes y la revista La Révolution Surréaliste, que sustituyó a Littérature, de cuya dirección se hizo cargo el propio Breton en 1925 y que se convirtió en el órgano de expresión común del grupo.
    La producción surrealista se caracterizó por una vocación libertaria sin límites y la exaltación de los procesos oníricos, del humor corrosivo y de la pasión erótica, concebidos como armas de lucha contra la tradición cultural burguesa. Las ideas del grupo se expresaron a través de técnicas literarias, como la «escritura automática», las provocaciones pictóricas y las ruidosas tomas de posición públicas. El acercamiento operado a fines de los años veinte con los comunistas produjo las primeras querellas y cismas en el movimiento.
     En 1930 Breton publicó su Segundo manifiesto del surrealismo, en el que excomulgaba a Joseph Delteil, Antonin Artaud, Philippe Soupault, Robert Desnos, Georges Limbour, André Masson, Roger Vitrac, Georges Ribemont-Dessaignes y Francis Picabia. El mismo año apareció el nuevo órgano del movimiento, la revista Le Surréalisme au Service de la Révolution, que suplantó al anterior, La Révolution Surréaliste, y paralelamente, Aragon (tras su viaje a la URSS), Éluard, Péret y Breton ingresaron en el Partido Comunista. A fines de 1933, Breton, Éluard y Crevel fueron expulsados del partido. En los años treinta se sumaron al movimiento Salvador Dalí, Luis Buñuel, Yves Tanguy, René Char y Georges Sadoul.
     Tras los años previos a la II Guerra Mundial, marcados por la militancia activa de Breton, y los años de exilio neoyorquino de la mayoría de sus miembros, durante la ocupación alemana de Francia, el movimiento siguió manteniendo cierta cohesión y vitalidad, pero a partir de 1946, cuando Breton regresó a París, el surrealismo era ya parte de la historia.

El Dadaismo

EL DADAISMO


     Es un movimiento cultural que surgió en 1916 en el Cabaret Voltaire en Zúrich (Suiza). Fue propuesto por Hugo Ball, escritor de los primeros textos dadaístas; posteriormente, se unió el rumano Tristan Tzara que llegaría a ser el emblema del Dadaísmo. Una característica fundamental del Dadaísmo es la oposición al concepto de razón instaurado por el Positivismo. El Dadaísmo se caracterizó por rebelarse en contra de las convenciones literarias y artísticas y, especialmente, por burlarse del artista burgués y de su arte. Su actividad se extiende a gran variedad de manifestaciones artísticas, desde la poesía a la escultura pasando por la pintura o la música.
     Para los miembros del Dadaísmo, este era un modus vivendi que hacían presente al otro a través los gestos y actos dadaístas: acciones que pretendían provocar a través de la expresión de la negación dadaísta. Al cuestionar y retar el canon literario y artístico, el Dadaísmo crea una especie de antiarte, es una provocación abierta al orden establecido.

     Artistas reconocidos de este movimiento fueron Tristan Tzara y Marcel Jank de Rumanía, el francés Jean Arp y los alemanes Hugo Ball, Hans Richter y Richard Huelsenbeck. Tras varios encuentros informales en distintos cafés, empezaron a darle forma a la idea de crear un cabaret internacional. La primera celebración tuvo lugar el 5 de febrero de 1916 en el Cabaret Voltaire, y consistió en un espectáculo de variedades con canciones francesas y alemanas, música rusa, música negra y exposiciones de arte. Ese mismo año se publicó un panfleto titulado Cabaret Voltaire que contenía aportaciones de Guillaume Apollinaire, Filippo Tommaso Marinetti, Pablo Picasso, Amedeo Modigliani y Vasili Kandinski; en la cubierta aparecía un dibujo de Jean Arp. En 1917 se inauguró la Galería Dadá.
     La expansión del mensaje dadaísta fue intensa, amplia y tuvo repercusiones en todos los campos artísticos. En Alemania encontró adeptos entre los intelectuales y artistas que apoyaban el movimiento espartaquista. En Francia ganó las simpatías de escritores como Breton, Louis Aragon y el poeta italiano Ungaretti.
El Dadaísmo suele ser una sucesión de palabras y sonidos a la que es difícil encontrarle lógica. Se distingue por la inclinación hacia lo dudoso, la muerte, lo fantasioso, y por la constante negación. Así, busca renovar la expresión mediante el empleo de materiales inusuales o manejando planos de pensamientos antes no mezclables, lo cual conlleva a una tónica general de rebeldía o destrucción. El Dadaísmo es caracterizado, también, por gestos y manifestaciones provocadoras en las que los artistas pretendían destruir todas las convenciones con respecto al arte, creando, de esta forma, un antiarte. El movimiento dadaísta es un movimiento antiartístico, antiliterario y antipoético porque cuestiona la existencia del arte, la literatura y la poesía. De hecho, por definición, cuestiona el propio Dadaísmo.
     El Dadaísmo se presenta como una ideología total, como una forma de vivir y como un rechazo absoluto de toda tradición o esquema anterior. En el fondo es un antihumanismo, entendiendo por humanismo toda la tradición anterior, tanto filosófica como artística o literaria.No por casualidad en una de sus primeras publicaciones había escrito como cabecera la siguiente frase de Descartes: «No quiero ni siquiera saber si antes de mí hubo otro hombre.»
     El Dadaísmo se manifiesta contra la belleza eterna, contra la eternidad de los principios, contra las leyes de la lógica, contra la inmovilidad del pensamiento, contra la pureza de los conceptos abstractos y contra lo universal en general. Propugna, en cambio, la desenfrenada libertad del individuo, la espontaneidad, lo inmediato, actual y aleatorio, la crónica contra la intemporalidad, la contradicción, el "no" donde los demás dicen "sí" y el "sí" donde los demás dicen "no"; defiende el caos contra el orden y la imperfección contra la perfección. Por tanto, en su rigor negativo, también está contra el modernismo, y las demás vanguardias: el expresionismo, el cubismo, el futurismo y el abstraccionismo, acusándolos, en última instancia, de ser sucedáneos de cuanto ha sido destruido o está a punto de serlo. La estética dadaísta niega la razón, el sentido, la construcción del consciente. Sus formas expresivas son el gesto, el escándalo, la provocación. Para el Dadaísmo, la poesía está en la acción y las fronteras entre arte y vida deben ser abolidas.
    El aporte permanente del Dadaísmo al arte moderno es el cuestionamiento continuo de qué es el arte o qué es la poesía; la conciencia de que todo es una convención que puede ser cuestionada y que, por tanto, no hay reglas fijas y eternas que legitimen de manera histórica lo artístico. Gran parte de lo que el arte actual tiene de provocación (como la mezcla de géneros y materias propia del collage viene del Dadaísmo.
    Con el fin de expresar el rechazo de todos los valores sociales y estéticos del momento, y todo tipo de codificación, los dadaístas recurrían con frecuencia a la utilización de métodos artísticos y literarios deliberadamente incomprensibles, que se apoyaban en lo absurdo e irracional. Sus representaciones teatrales y sus manifiestos buscaban impactar o dejar perplejo al público con el objetivo de que éste reconsiderara los valores estéticos establecidos. Para ello utilizaban nuevos materiales, como los de desecho encontrados en la calle, y nuevos métodos, como la inclusión del azar para determinar los elementos de las obras. El pintor y escritor alemán Kurt Schwitters destacó por sus collages realizados con papel usado y otros materiales similares. El artista francés Marcel Duchamp expuso como obras de arte productos comerciales corrientes —un secador de botellas y un urinario— a los que denominó ready-mades.
    En poesía el Dadaísmo abre el campo para la llegada del surrealismo y ayuda a crear un lenguaje poético libre y sin límites. Para entender qué es la estética dadaísta en el mundo de la poesía nada mejor que recoger los consejos que Tzara propone para hacer un poema dadaísta. El texto fue publicado en la recopilación Siete manifiestos dadá, «Dadá manifiesto sobre el amor débil y el amor amargo», VIII (1924).

El Futurismo

 

El Futurismo


     Fue el movimiento inicial de las corrientes de vanguardia artística, fundado en Italia por Filippo Tommaso Marinetti, quien redactó el Manifeste du Futurisme, publicado el 20 de febrero de 1909, en el diario Le Figaro de París.

    
 El futurismo surgió en Milán, Italia, impulsado por Filippo Tommaso Marinetti. Este movimiento buscaba romper con la tradición, el pasado y los signos convencionales de la historia del arte. Consideraba como elementos principales a la poesía, el valor, la audacia y la revolución, ya que se pregonaba el movimiento agresivo, el insomnio febril, el paso gimnástico, el salto peligroso y la bofetada irreverente. Tenía como postulados: la exaltación de lo sensual, lo nacional y guerrero, la adoración de la máquina, el retrato de la realidad en movimiento, lo objetivo de lo literario y la disposición especial de lo escrito, con el fin de darle una expresión plástica.
     Rechazaba la estética tradicional e intentó ensalzar la vida contemporánea, basándose en sus dos temas dominantes: la máquina y el movimiento. Se recurría, de este modo, a cualquier medio expresivo (artes plásticas, arquitectura, urbanismo, publicidad, moda, cine, música, poesía) capaz de crear un verdadero arte de acción, con el propósito de rejuvenecer y construir de nuevo la faz del mundo.
     El poeta italiano Filippo Tommaso Marinetti recopiló y publicó los principios del futurismo en el manifiesto de 1909. Al año siguiente los artistas italianos Giacomo Balla, Umberto Boccioni, Carlo Carrà, Luigi Russolo y Gino Severini firmaron el Manifiesto de los pintores futuristas.
     El futurismo procede directamente del cubismo, incluso los primeros cuadros, son de pleno derecho, cubistas, pero evolucionan rápidamente hacia una estética diferenciada, debido a su obsesión por representar la velocidad. Es un movimiento, fundamentalmente, italiano.
     El futurismo es el primer movimiento artístico que se organiza como tal, se reconoce y se define en 1910 a través del Manifiesto Futurista, que publica el poeta Fillippo Tomaso Marinetti. Se busca el escándalo, se admira la velocidad y la tecnología, las señas de identidad del mundo moderno y pretende romper con el pasado. Nada del pasado merece la pena ser conservado. Condenan a los museos, a los que considera como cementerios. Pretenden, y valoran, la originalidad por encima de todo.
     Sus obras se caracterizan por el color y las formas geométricas, y la representación del movimiento y la velocidad, para ello representan los objetos sucesivamente, pintándolos en varias posiciones, o emborronándolos, un código que se ha popularizado en los cómic y los dibujos animados. Tienden a utilizar colores puros. El futurismo llegará a la abstracción a través del rayonismo.

Representantes:


Umberto Boccioni (1882-1916) que es, además, el teórico del movimiento. Intenta representar los estados anímicos y el movimiento. Entre   us obras destacan: Dinamismo de un ciclista, Dinamismo de una cabeza de hombre, Dinamismo de una cabeza de mujer, La ciudad que crece, Estados del alma: los que se van.
Carlo Carrá (1881-1966) quedará fascinado por la tecnología y los espectáculos nocturnos. Entre sus obras destacan: Penélope, Ídolo hermafrodita,Lo que me dijo el tranvía.
Luigi Russolo (1885-1947) fue el que más se acercó a la abstracción. Entre sus obras destacan: Perfume, La música, Recuerdos de una noche.
Giacomo Balla (1871-1957) es el más fiel representante del futurismo. Investigó los problemas de la luz y el color. Los ritmos del arco, Dinamismo de un perro con correa, Niña corriendo en un balcón, Vuelo de golondrinas, Lámpara eléctrica.
Otros futuristas son Gino Severini: Entre sus obras destacan: Autorretrato, La bailarina obsesionante, Norte-Sur, Bailarina azul, Giuseppe CominettiPronunciado /guiusepe comineti/: Amantes en el agua, Kasimir Malévich: El afilador de cuchillos, y Enrico Prampolini: Composición.

Estética:


     Marinetti concibió esta nueva estética, inspirado en la patafísica de Alfred Jarry, en Remy de Gourmont y en procedimientos estilísticos, que este movimiento literario, no asumió, respecto de ninguna tradición formal, ni cultural previa. El futurismo fue llamado así por su intención de romper absolutamente con el arte del pasado (el llamado pasadismo), y por considerar que los museos, en especial en Italia, eran sitios equivalentes a los cementerios, donde la tradición artística común lo impregnaba todo.
     Según Marinetti, había que hacer tabla rasa del pasado y crear un arte nuevo, desde cero, acorde con la mentalidad moderna y las nuevas realidades, tomando como modelo a las máquinas y sus virtudes: la fuerza, la rapidez, la velocidad, la energía, el movimiento, la deshumanización.
     En la literatura, el futurismo abjura completamente del pasado y alienta a no respetar la métrica. Asimismo, intenta sustituir los nexos por notaciones algebraicas y buscar un léxico radicalmente hecho de tecnicismos y barbarismos, plagado de infinitivos, exclamaciones e interjecciones que denotan energía y libertad.
     El llamado teatro sintético del futurismo es el espacio en el cual las acciones ocurren a una velocidad vertiginosa, con tramas de no más de diez minutos, y donde se ocultan las presencias humanas, y sólo se ven los pies de los actores, cuyas figuras se adivinan por metonimia.
     La estética futurista pregona una ética, de raíz fundamentalmente machista, misógina y provocadora. Entre sus postulados se dignifica la guerra como una fórmula para el saneamiento de un mundo anacrónico y decrépito, y proscribe la argumentación sentimental o anecdótica.
Con el correr de los años, Marinetti fue politizando el movimiento, hasta coincidir con las tesis del fascismo, en cuyo partido ingresó en 1919.
     El futurismo fue un movimiento fundamentalmente italiano y de carácter literario (Marinetti), aunque tuvo expresiones importantes en la plástica (el pintor argentino Emilio Pettoruti y los pintores italianos Gino Severini, Carlo Carrà, Giacomo Ballao el escultor Umberto Boccioni). También tuvo adherencias en otras manifestaciones artísticas, en arquitectura (Antonio Sant'Elia) y en la música (el ruidismo del compositor Luigi Russolo, antecedente directo de la llamada música concreta).

El Futurismo en otros países:


     El futurismo tuvo sus más notables seguidores en otras naciones, como Rusia (los poetas Vladímir Maiakovski y Aleksei Kruchenykh, éste último creador del "lenguaje más allá del sentido", en ruso zaumnyi iazyk) y otros, en Bélgica (el escritor Émile Verhaeren), en Portugal (Fernando Pessoa, quien divulgó el movimiento a través de la revista Orpheu, 1915), en España (el poeta Joan Salvat-Papasseit) y en el Río de la Plata, donde algunos poetas reflejaron temporalmente la influencia de la corriente, por influjo de la primera visita de Marinetti al Cono Sur, en 1926. Marcos Fingerit, Brandán Caraffa y Alberto Hidalgo, en Buenos Aires, y Alfredo Mario Ferreiro y Juan Parra del Riego, en Montevideo.

Trascendencia:

     La importancia que tuvo el futurismo, más allá de sus méritos artísticos, consistió en crear una estética desde cero, con lo que se hizo posible una profunda renovación de las técnicas y principios artísticos, cuyas repercusiones aún se sienten. Fue uno de los primeros "ismos" o vanguardias artísticas, y su valor como movimiento de ruptura allanó el camino a otras corrientes que refrescaron el panorama artístico en los albores del siglo XX.
Muchas de sus técnicas para "figurar, con medios estáticos, el movimiento real" han sido incorporadas también al lenguaje de la historieta moderna.